| TITULO | Un Cura de Fronton y Lucha Libre |
| AÑO | 1960-1970 |
| PROTAGONISTAS | Padre Esteban |
| AUTORES | Miguel Angel Barroso – Fernando Diaz |
Aquí os dejamos dos anécdotas sacadas de Facebook y de algún comentario del blog, con el Padre Esteban se podían hacer un libro para el solo.
Miguel Ángel Barroso Lanza
Yo conocí el frontón de arriba, en el campo de la enfermería y recuerdo un día que jugando con el cura D. Esteban, con su sotana remangada a la cintura, al fallar, se plantó con brazos en jarras, mirando para el cielo y dijo: “Tu ya me entiendes”.
Fernando Diaz
Quiero recordar una historia en la que el Padre Esteban fue el protagonista principal; se corría el rumor de que en lo que era la antigua enfermería del colegio se había escondido un chino; y como cualquier detective al uso, fuimos Vicente Vernal, Cubillo y yo, a ver si teníamos la suerte de encontrarlo. Fuimos dando golpes y portazos por todas las habitaciones que estaban abandonadas con material incluso por el suelo y gritando, para así calmar nuestro propio miedo “CHINO CABRON, HIJO PUTA, SAL QUE TE VAMOS A MATAR”.
Hasta que dimos con una habitación cerrada y una silueta negra, que se intuía sobre los cristales biselados arreciamos nuestra furia y de repente se abrió la puerta y salió el Padre Estaban, con una cara desencajada nos encerró en una habitación y soltó toda su ira contra nosotros puedo deciros que lo del pulpo fue poco, había tirones de pelos, puñetazos ,patadas y se cortó cuando le dije gritando se lo voy a decir a mi padre cacho cabron, luego fue a hablar con un inspector y nos metieron domingos indefinidos de los cuales solo cumplimos uno.
Historias del Infanta Maria Teresa 
Mario Laparra
También recuerdo que fumaba en una pipa que le faltaba la boquilla, y también recuerdo a sus dos sobrinas entrando en la capilla el murmullo que corría por toda ella,un día levantando la forma en misa vio entrar a no se quién y dejó la celebración y se puso a gritarles a los que habían entrado » de rodillaaas no veis que estoy alzando al Santísimo», jodo si se pusieron anda queno,
El otro anónimo soy yo…. Urruchi
Yo recuerdo una anécdota del padre Esteban, solía venir en taxi al Colegio y un día Maestre Luque, que media 1,85 y estaba bastante fuerte, le dijo » padre porque no se compra un coche en vez de gastarse tanto dinero en taxis» al mencionado padre Esteban, que efectivamente escupía bastante (así llevaba la sotana), no le debió gustar aquel comentario y amenazo a Maestre con un tortazo o coscorrón, claro que al ver la mole que se lo decía dio media vuelta y se fue.
Hola antiguo compañero Apesteguia, soy un «externo», Juanjo Millán….., no se si te acordarás de mi…..bueno estaba en vuestro curso en laboral….., si lees el mensaje ponme una nota…., mi correo: jjmillanmillan@gmail.com. Espero que estés bien y abrazo grande
Te creo Fernando y creo que la ira le cegó. Tenía un arma mas peligrosa que sus puños y era que escupía al hablar.
Fumaba puros continuamente y yo no se si esa circunstancia le estimulaba de alguna manera las glándulas salivales que cada vez que hablaba escupía saliva de color negro de nicotina y eso era para salir corriendo.
En clase, a veces pedía que le llevasemos uno de nuestros libros y todos nos haciamos los remolones porque lo devolvía por la página en que lo abría lleno de manchas negras de nicotina.
Era el auténtico «Pater militaris» de aquella época; nada que ver con los actuales, que se lo curran.
Yo también tengo otro recuerdo amargo del padre Esteban.
Una mañana sentadito en la capilla esperando que Don Esteban llegase de dar su vuelta cotidiana por el estudio para fichar a todos aquellos que preferían no asistir a misa: Durante la espera me estaba leyendo una novela del Oeste. El bueno se llamaba Billy o James… no recuerdo. El caso es que media siete pies de altura y era zurdo, como yo. Se disponía a enfrentarse con una banda de malvados cuando de pronto… y a traición, una sombra negra llegò detràs de mi y me arreò una magistral ostia que resonò en toda la capilla.
Me agarrò la novela y la destruyò totalmente. Nunca supe si el bueno saliò victorioso aunque me lo imagino.
El santo padre me suspendiò en Religión y Vida sobrenatural.
Mayor creo y recuerdo es que como fumaba de todo los paquetes con los «ideales» se dab un atracon que tenia un doctorado en lanzar escupitajos